Ya llevamos una semana del nuevo año y es momento para hacer un recuento de mis lecturas del pasado año, ese año tan raruno que hemos vivido y que esperemos que no vuelva a repetirse nunca más. Un año que, curiosamente, ha sido muy bueno en cuanto a lecturas.
He leído un total de 53 libros de los cuales, la gran mayoría, han sido buenas lecturas. Pero, sí, también ha habido grandes decepciones.
Empecemos por los cinco libros que más me han gustado (aunque la lista podría ser más larga).
Voy a contar la Trilogía de Carmen Mola como un pack indivisible, así que lo cuento como uno solo. Y deciros que la única forma que tengo de describir esta trilogía es como BRUTAL. La primera novela es muy buen, un buen thriller de esos que enganchan desde el principio, la segunda novela te atrapa y toca un tema muy duro pero la tercera novela es... ¡¡¡woooow!!! Muy fuerte. No apta para sensibles (No tengo claro qué dice de mi que me haya gustado tanto una trilogía tan fuerte...).
Las fuentes del Silencio de Ruta Sepetys ya os la reseñé en su momento y os dije que me había encantado. Una novela histórica con una preciosa historia de amor de fondo. Os la recomendé entonces y lo vuelvo a hacer ahora ¡Preciosa!
Sobre Las hijas de la tierra de Alaitz Leceaga ¡una maravilla! Me encanto la primera novela de la autora, El bosque sabe tu nombre, por lo que tenía una expectativas altísimas con esta novela pero a la vez temía que me decepcionaría porque la novela anterior dejó el listón muy alto. Pues incluso llegó a superar mis expectativas. Ya esto deseando leer su próxima novela.
Un cuento perfecto ha sido la primera novela que leo de Elísabet Benavent y seguramente este año lea alguna otra novela suya. No me esperaba que me riera tanto con ella ni disfrutara tanto de las aventuras de los personajes.
Cuando decide el corazón de Elizabeth Bowman fue otra novela que me sorprendió. Este año pasado he estado especialmente romanticona (y aún sigo así que este año también habrá lecturas románticas en mi lista) y me encantaron los personajes y la trama de esta novela romántica histórica. La disfruté muchísimo y me hizo ir a por más novelas del mismo género. La historia de amor tiene una pasión a la vez que una candidez (no hay nada de sexo) que tanto me recuerdan y gustan de Orgullo y Prejuicio.
Hay muchas más novelas que me han gustado este año y no están en el podio simplemente porque estas cinco (siete si separamos la trilogía) me han apurado el gusto.
También hay lecturas que no me gustaron pero de esas, afortunadamente no hay muchas. Voy de a destacar cuatro que fueron verdaderas decepciones y que aún sigo mirando con odio cuando las veo en la estantería:
Mi estreno con Joël Dicker no ha podido ser peor. Ya os lo comenté cuando reseñé El enigma de la habitación 622 (y os invito a leer los comentarios que otros lectores han dejando en la entrada). Sin duda, la que considero la peor lectura del año.
¿Qué decir sobre La cara norte del corazón de Dolores Redondo? Con lo que me gustó la Trilogía del Batzán y lo que llegó a aburrirme esta novela. Amaia Salazar llegó incluso a caerme mal. Si lo leí completo y no lo abandoné fue porque era una lectura conjunta.
Y lo mismo me pasó con Una promesa de Juventud de María Reig, no la abandoné porque era lectura conjunta.
Este año leí también Papel y Tinta de esta misma autora y me encantó (de hecho, he estado a punto de ponerla en el podio de las mejores lecturas del año). Aquella fue una novela que me atrapó, me transportó a la época y disfrute muchísimo, así que esperaba con ganas la nueva novela de María Reig. Menudo batacazo me llevé cuando la leí... Para mi le sobraban 400 de las 752 páginas que tiene. No llegó a atraparme en ningún momento ni sentí empatía por ninguna de los personajes.
De La hija del relojero de Kate Morton no esperaba gran cosa, la verdad. No le tenía muchas expectativas así que hubiera sido fácil que las superara pero ni con esas... ¡Me aburrió muchísimo! Si me lo acabé fue porque un seguidor de Instagram me digo que me esperara, que el final merecía mucho la pena. No, no y no. Tiempo desperdiciado en su lectura.
¿Qué tal ha sido vuestro 2020 lector? ¿Qué han predominado, las buenas o las malas lecturas?
Besotes y Felices Lecturas
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