La adolescencia es complicada para las niñas, los niños y los padres, por eso toda ayuda es bienvenida (muy bienvenida).
Ya os he hablado de un par de guías para ayudar a las chicas (y a sus padres) a sobrellevar lo mejor posible esta complicada etapa (Guía genial para una chica como tú y Un batido de emociones), pero ¿y los chicos? ¿acaso su paso por la adolescencia es más sencillo y no necesitan ayuda extra? ¡NO! Yo, como sufrida madre de un adolescente de 13 años, os puedo decir que la adolescencia masculina es igual de complicada.
No os podéis ni imaginar lo bien que nos ha ido a ambos (a la criatura del demonio-más guapo mi niño- y a mi) los consejos y explicaciones de Qué buen rollo el desarrollo de Matías Néspolo.
Los temas que toca les son afines y es necesario que los conozcan y entiendan.
Es por ello que el lenguaje que utiliza la guía es claro, directo y sencillo. Además, tal y como ya vimos en las guías anteriores, todo está presentado con unas divertidas ilustraciones de la mano de Raquel Gu.
La intención es hacerles ver a las criaturicas (y con este término englobo a adolescentes y a progenitores) que los cambios que están sufriendo son normales y que esta etapa no es el fin del mundo, que todo pasará.
En la adolescencia se producen (sufren) muchos cambios físicos, pero también psicológicos:
Y no es broma, que de piedra me quedé cuando vi que apartaba el móvil (dichosas pantallas). Porque aunque pensemos que están bien, los cambios están ahí y ellos necesitan consejos, ayuda y saber que esos cambios son normales.
Estoy segura que ¡Qué buen rollo el desarrollo! ha sido un buen regalo para mi hijo pero también para mi porque conocer mejor la etapa por la que está pasando me ha hecho tener más paciencia con él y comprenderlo mejor.
Tanto si el adolescente es vuestro hijo, como un hermano, un sobrino o el hijo de un amigo estoy segura que esta guía le será de gran ayuda.
Besotes y Felices Lecturas
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