Reseña: "La última paloma", Men Marías

De nuevo os traigo mi opinión sobre un thriller y de nuevo es de esos que dejan con la boca abierta. Hoy os quiero hablar de La última paloma de Men Marías.

Nº de páginas: 544

Editorial: Planeta

Encuadernación: Tapa dura

ISBN: 9788408242307

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Frente a la base naval de Rota, tras el cordón policial que acordona la brutal escena, un grupo de vecinos clama que se haga justicia: el cuerpo de la joven Diana Buffet yace salvajemente mutilado y con unas enormes alas cosidas a su espalda.

Ni las cámaras ni el helicóptero de vigilancia de la base han captado una sola imagen que pueda servir a la investigación; algo incomprensible.

La sargento Patria Santiago sabe que el asesino va a volver a matar, pero nadie la cree, ni siquiera el cabo Sacha Santos -a quien le gustaría ser algo más que su compañero-, porque al igual que piensa el resto de Rota, Patria ha convivido con el dolor demasiado tiempo como para ser de fiar.

Una sola pista, la investigación que Diana estaba haciendo sobre la base, y su relación con la desaparición de una joven hace sesenta años, cuando los americanos llegaron a Rota, parecen ser los únicos hilos de los que tirar.

Con La última paloma nos encontramos ante la segunda novela de la autora pero con su primera incursión en el thriller ¡y menuda primera incursión! ¡De las que dejan marca!

En esta novela, Patria Santiago, una sargento de la guardia civil marcada profundamente por una traumática infancia y el cabo Sacha Santos, enamorado y dispuesto a hacer lo que sea por ella, se embarcan en la búsqueda de un asesino que ha mutilado y asesinado salvajemente a la joven Diana Buffet. Lo que todos consideran un asesinato aislado, fruto de un arrebato de pasión, se convierte en el primer asesinato de un asesino en serie. Un asesino que no mata por matar, sino que está marcado por un antiguo propósito.

Patria y Sacha no solo tendrán que lidiar con los grandes misterios de esta investigación sino que tendrán que superar sus propios miedos y secretos.

Soy lectora habitual de thriller (tan solo tenéis que mirar mis últimas reseñas) así que creo que estoy acostumbrada a escenas duras, macabras y a asesinatos de los que ponen la piel de gallina. Pero ¿os podéis creer que en La última paloma tuve que dejar de leer un rato porque se me estaba poniendo mal cuerpo? Y curiosamente, no lo digo como algo negativo ¡todo lo contrario! Me encanta que una novela no me deje indiferente, que me haga sentir.

En esta ocasión, no solo son víctimas las denominadas "palomas" sino algunos de los protagonistas por sus propias vivencias, por aquellas cosas de su infancia que les han hecho ser como son ahora y que se enfrentan a ello lo mejor que pueden, aunque no sea siempre de la mejor manera. 

Al principio, no sé bien por qué, me costó un poco meterme en la historia, más o menos durante el primer tercio. Pero luego... ¡madre mía! Empieza a ponerse muy, muy interesante. Imposible soltarlo. La autora no se calla nada, nos presenta los hechos tal cual son, sin paños calientes. Sin importarle que nos duela, y ya os digo que duele, porque hay situaciones que... uff... no puedes leerlas sin tragarte un gran nudo.

La autora no solo nos habla de los actuales crímenes sino que también nos traslada al pasado, a los primeros años de la base naval, en los 50,cuando el pueblo se movía en una doble moralidad: la temerosa del pecado, recatados y sumisos y el desenfreno traído por los americanos donde el alcohol y el sexo eran la mejor forma de pasar el día. Un desenfreno criticado pero a la vez tolerado. 

En ambos momentos, el actual y el pasado, la autora va dejando migas de pan, pequeños cabos sueltos que nosotros intentamos juntar (pobre ilusos) mientras vamos haciendo nuestras propias cábalas, vamos buscando una explicación a tan atroces asesinatos. 

Antes os he comentado que en ocasiones la lectura de ciertos pasajes me dejó mal cuerpo, pero ese mal cuerpo no era de asco u horror (o no solo, al menos) sino también de pena, de dolor, de lástima, porque al estar escrita la novela en primera persona (desde el punto de vista, principalmente, de Patria y Sacha) llegamos a conocer tan bien a los personajes que sentimos su dolor como propio, lo sufrimos con ellos.

Además, ya sabéis que soy muy empática así que casi siempre termino metiéndome en la piel de los personajes y queriéndolos u odiándolos según su papel en la historia. En esta novela hay varios personajes a los que llegué a cogerles mucho cariño (incluso con Sacha llegué a reírme) y otros a los que llegué a odiar muchísimo ¡y no solo al asesino! Que no solo es malo aquel que empuña el cuchillo.

No sé si habéis leído la Trilogía de Carmen Mola. A mi me pareció BRUTAL, así, en mayúsculas. Pues La última paloma puedo decir que es su prima hermana. De todas mis amistades que la han leído, solo a una no le ha gustado (pero es que a ella no le gustan los thrillers macabros). 

A mi, personalmente, me ha encantado y me gustaría leer más sobre Patria y Sacha porque son personajes de esos que no cansan, de los que quieres saber más tanto de su vida privada como de sus casos por resolver ¿Nos deleitará Men Marías con una continuación?

Así pues si sois amantes del género y os gusta que las novelas os pongan la piel de gallina, adelante, no dejéis pasar La última paloma de Men Marías.

Besotes y Felices Lecturas