Conversando entre libros: Reseña: "Tu nombre después de la lluvia", Victoria Álvarez

Nº de páginas: 584 págs.

Encuadernación: Tapa dura

Editoral: LUMEN

Lengua: CASTELLANO

ISBN: 9788426400079

Gracias a Tu nombre después de la lluvia, ya tengo una autora a la que me voy a aficionar. Cuando esta novela me llegó, gracias al concurso que gané de su página de Facebook, pensaba que era el primer libro que había escrito Victoría Álvarez pero éste es ya el tercero (antes escribió las Eternas y Hojas de Dedalera).

"Érase una vez en Irlanda..."

Corren los primeros días de enero de 1903 y el profesor Quills, un hombre sabio y triste, vuelve a su casa de Oxford después de asistir a unas conferencias en Londres; Oliver Saunders, joven y tímido, trabaja en su pequeño cuarto de Balliol College, rodeado de diccionarios y novelas góticas; Lionel Lennox, amante de la buena vida y de las faldas ligeras, está en Egipto, a punto de profanar la tumba de una princesa para llevarse una joya de inestimable valor.

Poco tienen en común los tres amigos, excepto el interés por las nuevas ciencias que exploran el mundo del más allá, y muy pronto sus ganas de saber los llevarán a Irlanda, una tierra plagada de leyendas, donde las piedras tienen una historia que contar y el sonido de la lluvia se confunde con el llanto de las mujeres."

La historia está ambienta en el Londres y en la Irlanda de 1900. Cuando había un gran interés por conocer qué había más allá de la muerte, cuando las sesiones de espiritismo estaban a la orden del día, los medium tenían gran fama y se hacían experimentos para hablar y retratar a los espirítus o su ectoplasma. Y en esta novela estamos ante eso: tenemos como protagonistas a cuatro hombres aficionados a la búsqueda de lo sobrenatural. Alexander, un profesor que inventa máquinas para comunicarse con los muertos, Oliver, un joven enamorado de las novelas góticas, Lionel un aventurero saqueador de tumbas faraónicas y August, un cura anglicano que también es medium. Cuatro hombres que además son los fundadores de un periódico quincenal que se centra en la publicación de casos sobrenaturales (o nuevas ciencias) , Dreaming Spires.

Serán los tres primeros, tras recibir una misteriosa carta , los que viajarán hasta Irlanda para liberar a todo un pueblo del terror que le provoca la Banshee que mora en el castillo de Maor Cladaich y poder así conseguir un gran artículo para su periódico.

¿Una Banshee? Sí, una banshee. Es un espíritu femenino que con sus llantos y gemidos anuncia la muerte de alguna persona. En principio, las banshee pertenecen a una familia y solo anuncian la muerte de alguien de esa familia, pero en la novela, en los últimos meses, la que consideran la banshee de los O'Laoire (familia que habita desde tiempo inmemoriales el castillo) anuncia la muerte también de aquellos que visitan y mueren en el castillo y los habitantes de Kilcurling temen oír su llanto y no volver a ver salir el sol.

Será en este castillo donde Alexander, Oliver y Lionel vivirán una de sus mayores aventuras. Conocerán a los dos últimos miembros vivos del clan O'Laoire, Oliver descubrirá al amor de su vida por el que estará dispuesto a todo, habrá líos de faldas, venganzas, misterios resueltos y sin resolver, amores antiguos, almas en pena, asesinatos, inocentes inculpadas y llevadas a la horca e incluso una misteriosa y hermosa joven venida de Rumanía que eclipsará a todos los hombres que la miran.

Es Tu nombre después de la lluvia, una novela perfectamente ambientada en las costumbres de principios del siglo XX. Había momentos en los que estaba tan sumida en la historia que creía estar leyendo una historia escrita por una escritora de la época.

Bien escrita, bien argumentada, bien documentada y sin dejar cabos sueltos (que ya estoy cansada de tantas novelas con final abierto para dejar la puerta abierta a una segunda, tercera, cuarta, quinta parte...).

Ya me imaginaba, por la sinopsis, que la historia me gustaría, pero no que me gustaría tanto. Para mí, que he de compaginar la lectura con el trabajo, la casa, el hijo, el marido, el otro blog... leerme casi 600 páginas en poco más de una semana es símbolo inequívoco de que durante esos días todo el tiempo que he tenido libre ha sido única y exclusivamente para invertirlo en la lectura de la novela, y eso solo lo hago cuando la novela me ha cautivado completamente.